EL SECRETO DE LA LONGEVIDAD

“NUCHI GUSUI”
Esta frase japonesa usada para designar la comida y cultura tradicional de Okinawa, significa que “la comida debe ser tu medicina y tu medicina debe ser tu comida.”
Algunos de vosotros habréis oído hablar de Okinawa, una isla japonesa en donde la esperanza de vida supera ampliamente los 80 años y no es difícil encontrar a personas con más de 100. También hay que resalta que la mujer más vieja del mundo es japonesa y tiene 116 años y el hombre más viejo, también nipón, con 113 años.
Las personas en Okinawa tienen un estilo de vida muy sano y esto motivo a un grupo de investigadores a descubrir porque las personas en Okinawa son delgadas, viven más tiempo y son más sanas que el resto de la población global. Apenas hay casos de cáncer y la gente se puede jubilar pasados los 80 años sencillamente porque se encuentran en perfecto estado. El resultado de su investigación se encuentra en un libro llamado “The Okinawa Program” escrito por Mokoto Suzuki y Bradley Willcox .
Las personas residentes allí creen que para mantenerse sano y joven hay que mantener una “silla con cuatro patas” que son: Alimentación, ejercicio, felicidad y relax. Puestos a comparar comprobamos como en el estilo de vida occidental se obvian estos conceptos y por supuesto, hacemos todo lo contrario.

En Okinawa no hay multitud de gimnasios, ni falta que les hace. Andan mucho y utilizan la bicicleta como medio de transporte. Igual que aquí ¿verdad?

La alimentación es digna de estudio. Las personas en Okinawa comen más vegetales y frutas al día que productos animales. Se ha cuantificado que comen aproximadamente 10 tazas de vegetales o frutas especialmente zanahorias, repollo, algas, cebollas, pimientos verdes y soya (en forma de tofu, rica en proteínas y otros nutrientes). Además comen de 3 a 5 tazas de granos enteros como pastas, arroz, maíz etc.

¿Son por tanto vegetarianos? No. Siendo una isla el pescado es el alimento animal favorito y lo comen de una a tres veces al día, eso sí, en cantidades pequeñas. Generalmente se trata de pescados de agua fría o salada como el salmón y la tuna. Estos pescados son ricos en ácidos grasos omega 3 , una grasa fundamental para nuestro organismo. Muy diferente a las grasas saturadas contenidas en los productos animales o las grasas vegetales que son hidrogenadas como las margarinas, que aumentan el colesterol y bloquean las arterias.

En cuanto a la bebida el té es la favorita en Japón. Té verde y té negro, sin azúcar y sin leche, el cual tiene un gran poder antioxidante. Además beben entre 8 y 12 vasos de agua al día.

Un concepto importantísimo es el “Hara Haci Bu” que significa dejar de comer cuando estás el 80% lleno. En otras palabras no comer hasta llenarte totalmente. Esto es saludable porque le toma al cuerpo varios minutos decirle a la mente que ya está lleno y no necesita más. Sin embargo en la mayoría de la población mientras esta comunicación se efectúa generalmente continuamos comiendo. De manera que si comes hasta llenarte en realidad estas comiendo más de la cuenta, más de lo que precisas. Si haces una pausa de 20 minutos veraz que el hambre desaparecerá.

Esto es algo que insisto yo mucho a las personas que me consultan sobre dietas y alimentación en general. Comemos demasiado. Hay diversos estudios realizados con ratones de laboratorio que demuestran que aquellos ratones a los que se le redujo la ingesta calórica con respecto a otro grupo al que siguieron alimentando igual, vivieron más. Y esto mismo podemos trasladar a los humanos con el caso que estoy narrando de Okinawa. Y para apuntillar esto una frase de Indurain que se me quedó grabada: “el secreto está en levantarse de la mesa con un poco de hambre”. Algo que no muchos hacen. E incluyo a deportistas que creen que por haber entrenado “x” kilómetros un día, ya tienen carta blanca para ingerir todo lo que quieran.

Hay algo más: la propia filosofía de vida de los japoneses. Trabajan mucho , muchísimo. Habréis oído hablar de la “huelga a la japonesa” pero no les pesa. Al contrario está mal visto aquel que pudiendo no trabaja. Se le desprecia por ocioso, vago, improductivo, …. Se realizan con su trabajo, son felices con él. Y al desarrollarlo procuran huir del estrés, procurando sus momentos de relax. También los lazos familiares son profundos porque en la familia encuentras un apoyo fundamental.

Ahora os dejo que comparéis todo esto con lo que se hace en España o en cualquier país occidental. Sí, las comparaciones son odiosas, pero cuando se trata de salud….